Aunque éstos funcionen bien, puede que los resultados que estén arrojando no tengan la precisión adecuada.
Por ello uno de los procesos vitales para asegurarse de que los equipos funcionen de forma óptima es la calibración. Este procedimiento determina y documenta la diferencia entre las lecturas entregadas por dicho equipo y las compara con las lecturas entregadas por un estándar de medición, lo cual permite posteriormente hacer un ajuste necesario para que esa diferencia en los resultados se minimice.
Es común que con el uso y el paso del tiempo tanto equipos como herramientas tiendan a reducir su exactitud en las mediciones, es por ello que la calibración debe ser un proceso obligatoriamente aplicado.
Es importante señalar que los periodos de calibración pueden ser semanales, quincenales, mensuales, trimestrales, semestrales, anuales o en lapsos específicos según las aplicaciones de los instrumentos de medición. El proceso de estimación entre calibraciones es dinámico, se debe realizar un cronograma y ajustarse según sea necesario para equilibrar los riesgos, costos y factores que pueden afectar la precisión de los instrumentos. Algunas consideraciones importantes para establecer los periodos de calibración serían:
Y una recomendación no menos importante que hay que tomar en cuenta es la sugerencia de medición por parte del fabricante del equipo que determinará de forma estándar, el periodo en el cual se debe hacer dicho procedimiento
Esta calibración solamente pueden llevar a cabo quienes están autorizados para realizar este proceso, que generalmente son los Laboratorios de Calibración certificados por el estándar internacional ISO 17025.
Mientras que el ajuste es un procedimiento independiente de la calibración y no es más que una intervención al equipo calibrado mediante una corrección física, electrónica o por software, para modificar las mediciones que está realizando y se ajusten a las permitidas.
Existen diversos tipos de ajustes de un sistema de medida, como son: ajuste a cero, ajuste de offset (desplazamiento) y ajuste de amplitud de escala (o ajuste de ganancia). Cabe aclarar que posterior a este ajuste debe existir una nueva calibración con el fin de realizar la comprobación de los resultados. El certificado de calibración debe informar los valores antes y después de realizado el ajuste, por lo que el procedimiento correcto sería hacer la calibración luego de dicho ajuste para comprobar que en efecto los resultados que está arrojando el equipo sean los correctos.
Si bien la calibración es un proceso imprescindible, hay que tomar en consideración otro paso alterno a un certificado de calibración, ya que no se puede garantizar que la precisión se mantenga durante todo el intervalo de calibración de ese equipo, por ello es necesario hacer una verificación a los equipos de manera frecuente.
Lo cual significa que, para este procedimiento en particular, no se necesita de entidades externas, sino que los operadores de dichos equipos lo pueden hacer internamente siempre y cuando sea realizada por personal que tenga las competencias necesarias y utilice los equipos patrones adecuados.
Porque existen numerosos factores que pueden afectar negativamente al funcionamiento del equipo, como daños accidentales o la acumulación de residuos, es por esta razón que las normas exigen que se verifique la precisión y el funcionamiento antes de cada uso, normalmente al inicio del turno laboral y volver a comprobarse después de que el equipo en uso haya obtenido un gran número de mediciones, para saber si el medidor se cae o si se sospecha que está arrojando resultados erróneos.
Cabe aclarar que la verificación en general se realiza en algunos puntos de la escala del instrumento y no siempre se informan los resultados de las mediciones, sino que básicamente confirma si el instrumento cumple o no cumple con la reglamentación.
Cuando se trata de equipos de diagnóstico vehicular, tanto el ajuste, la calibración como la verificación, son procedimientos primordiales para el buen funcionamiento de los equipos y garantiza sin duda, que los resultados de sus análisis sean eficientes e íntegros.
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