Tomando en cuenta que las emisiones de gases dependen directamente del estado del vehículo, es necesario poner especial atención a los periodos en los que el automotor requiere ser revisado en el taller de servicio o concesionario.
El éxito de la prueba de emisión de gases en el control de la Revisión Técnica (RTV) depende directamente del estado mecánico del automotor. En el caso de tener una avería mecánica el conductor automáticamente sentirá una mayor demanda de potencia lo cual significa un mayor consumo de combustible y mayor tasa de emisiones.
Los siguientes consejos pueden ayudar a reconocer las fallas mecánicas que se producen para que el auto contamine más mientras circula y las soluciones a las mismas:
Si se detecta la luz del motor encendida es una alerta de que hay un problema en el sistema de emisiones, que tiene que ver con el sensor de oxígeno, mismo que se encarga de revisar la mezcla de gas y aire para que exista una quema de combustible adecuada. Cuando este sistema falla, no se puede determinar a ciencia cierta los niveles de contaminación que está emitiendo el vehículo y seguramente el auto no pasará la prueba de emisiones.
Los expertos recomiendan que al menos dos semanas antes de asistir al Centro de Revisión (CRTV) se debe conducir el auto a velocidad de carretera (entre 80 y 100 km/h), siempre respetando el máximo de velocidad permitido.
Este consejo es porque las velocidades altas aumentan la temperatura del convertidor catalítico, quemando los restos de petróleo y gas acumulado, logrando emisiones más limpias y seguramente un mejor rendimiento al momento de presentarse al diagnóstico técnico.
Si se presume que el humo que emite el vehículo no es común, es necesario revisar la cartilla del último cambio de aceite que se realizó al auto. Retrasar en exceso el cambio de aceite conlleva dos problemas, por un lado, puede existir una saturación del aceite que no le permita atrapar o permear las partículas que necesariamente tendrá que el vehículo eliminar por el tubo de escape, contaminando el ambiente y no solo eso, por otro lado, se pueden taponar los filtros de partículas lo que puede a su vez, traer consecuencias a futuro.
La visita al taller mecánico previa a la prueba de gases es indispensable para asegurar el buen funcionamiento del vehículo y por ende evitar emisiones contaminantes producto de algún desperfecto, lo recomendable es hacerlo dos semanas antes del test, esto servirá para que las mangueras estén en buenas condiciones y no aparezcan fugas, al igual que el reemplazo de los filtros para asegurar que no exista contaminación acumulada.
Una opción puede ser el uso de aditivos que recomiende la marca del vehículo, días previos a la Revisión Técnica (RTV). El compuesto se coloca directamente en el tanque de combustible y limpia los inyectores, mejora la calidad del combustible y reduce las emisiones de gases. Luego de colocado el aditivo se recomienda que se circule unos 80 km para obtener resultados.
Un detalle para tomar en cuenta es revisar la tapa del tanque de la gasolina y la razón es porque no debe tener ninguna grieta. En caso de encenderse la luz del motor, provocará que el auto falle la prueba de gases de forma inmediata.
Con el tiempo este líquido puede perder sus cualidades y las consecuencias podrían afectar directamente a la emisión de gases, sobre todo cuando la frenada pierde efectividad y el conductor debe pisar más fuerte y durante más tiempo el pedal del freno, aumentando el desgaste de los discos y pastillas debido a la fricción, generando partículas nocivas.
Con el tiempo este líquido puede perder sus cualidades y las consecuencias podrían afectar directamente a la emisión de gases, sobre todo cuando la frenada pierde efectividad y el conductor debe pisar más fuerte y durante más tiempo el pedal del freno, aumentando el desgaste de los discos y pastillas debido a la fricción, generando partículas nocivas.
Tanto los sistemas de suspensión y dirección como todos sus componentes, en especial los amortiguadores y rótulas en mal estado, aumentan la resistencia al correcto avance del vehículo y provocan también un mayor desgaste y consumo de emisiones.
En definitiva, la principal recomendación es la visita oportuna al Centro de Servicio o Taller autorizado para los chequeos mecánicos periódicos del auto, de esta manera el conductor y propietario tendrá la certeza de que los diagnósticos obligatorios para pasar la RTV serán superados sin contratiempos.
El control de las emisiones de los vehículos conlleva una doble responsabilidad para el ciudadano que conduce un auto. No solamente el cumplimiento de la ley establecida por los organismos de control sino también el aporte y reciprocidad con el medio ambiente, que finalmente es el aire que se respira a diario, es por ello, por lo que cada vez, hay más opciones en el mercado de los autos híbridos y eléctricos en los que se ven a futuro una solución para controlar las emisiones de gases contaminantes y la reducción del daño que éstos producen al entorno.
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